Noticias - Actualidad - Política Criminal.-
Un informe de la Corte indica que los homicidios dolosos
aumentaron en zonas marginales y en situaciones de riñas y ajustes; qué otros resultados
arrojó el relevamiento.
La Corte Suprema de Justicia presentó los resultados de
una investigación sobre homicidios dolosos ocurridos en 2011 en Capital y los
partidos de La Plata y San Martín.
Según este relevamiento, en la ciudad de Buenos Aires
hubo 190 homicidios el año pasado, lo que significa una tasa de 6,57 cada
100.000 habitantes. Esto representa un aumento con respecto a los 168
homicidios dolosos registrados en el informe de 2010.
Pero el dato que destacó el juez Raúl Eugenio Zaffaroni es
que, en cuanto a los móviles de los asesinatos, se puede decir que "hay un
marcadísimo descenso de los homicidios en ocasión de robo en 2011 en la
ciudad".
En los números recabados por la Corte, sólo representan
el 15 por ciento (28) del total. Mientras que, por otra parte, la categoría
"riña/ajuste/venganza" es el móvil del 39 por ciento (75 casos) de
los homicidios ocurridos en la ciudad en 2011. De esos 75, 37 homicidios fueron
cometidos por riñas y 38 por motivos de ajustes de cuenta o venganzas.
"Tenemos que considerar que los números absolutos
indican poco. Afortunadamente en nuestro país los universos de
homicidios son reducidos, por eso tres o cuatro casos más pueden alterar
radicalmente los índices", aclaró Zaffaroni durante la presentación del informe.
Las "zonas calientes"
Otro de los datos arrojados por el informe, es que la
mayoría de los homicidios dolosos se produjeron en "barrios de
emergencia".
"Según el mapa de calor que pudimos armar, la
concentración de homicidios dolosos se da en barrios de emergencia. La zona sur
tiene una tasa de 13,8 homicidios cada 100 mil habitantes. Concentra el 73 por
ciento de los homicidios de la ciudad", detalló Zaffaroni.
"Los barrios de emergencia en la ciudad tienen unos
170 mil habitantes. Los asesinados en estas zonas representan a 66 de las 190
víctimas de 2011", añadió el magistrado.
Sobre estos números, Zaffaroni indicó que "la
criminología mediática no se ocupa de estos casos en los que los homicidios
aumentan". "Pareciera que hay homicidios de primera y homicidios de
segunda clase. Los medios se centran en los primeros, aunque el número de
muertos aumenta en los segundos", dijo.
Derrumbar prejuicios
Evaluando los resultados arrojados por el informe,
Zaffaroni señaló que algunos datos permiten derrumbar ciertos prejuicios. Por
ejemplo, las referencias que señalan a extranjeros como responsables de la
mayoría de los crímenes. Según el relevamiento de 2011, sólo un 15 por ciento
de los imputados por homicidios dolosos son extranjeros. En cuanto a las
víctimas, los extranjeros representan un 34 por ciento.
Otro de los datos destacados por el ministro de la Corte,
es el de los menores involucrados en estos homicidios. Sólo dos menores de 16
años fueron acusados por homicidios cometidos en la ciudad en 2011.
"Con esta información bajamos el tono del debate
sobre la baja de la edad de imputabilidad: la participación de los menores en
estos hechos es mínima", sostuvo Zaffaroni.
San Martín y La Plata
El informe presentado este año se amplió hacia dos zonas
de la provincia de Buenos Aires: los partidos de La Plata y San Martín.
En el caso de San Martín, que tiene 1.600.000 habitantes,
en 2011 hubo 121 homicidios dolosos, según el informe de la Corte. La tasa es
de 7,47 cada 100.000 habitantes. En tanto, los menores de 16 acusados de
homicidios fueron 5.
En La Plata, que cuenta con 1.160.000 habitantes, hubo 62
víctimas, lo que significa una tasa de 5,34. Los menores inimputables
implicados en estos homicidios fueron 3.
Prevenir, el paso fundamental
"¿Qué podemos aprender de estas estadísticas?",
se preguntó Zaffaroni. Y se respondió: "Que la exclusión social genera
economías de subsistencia. Que esto hace que organizaciones ilícitas recluten a
personas por más dinero que el que estas personas pueden obtener en actividades
lícitas. Así, se convierten en economías violentas de subsistencia. Si no hay
control, eso se puede convertir en catástrofe, como sucede en algunas zonas de
Brasil".
"Por suerte estamos muy lejos de esas
situaciones", aclaró el magistrado. "Pero los números nos muestran
que debemos estar atentos, que tenemos que actuar en prevención", añadió.
Esta prevención, explicó Zaffaroni, debe ser de dos tipos. Primaria, en donde
es clave un buen plan de urbanización de las zonas de emergencia. Y secundaria,
en donde hay que formar fuerzas de seguridad eficaces.
Fuente: www.lanacion.com
No hay comentarios.:
Publicar un comentario